Lo verdaderamente interesante del lanzamiento de Threads en Europa es que traerá un cambio muy importante y crucial para cumplir con los requisitos de los reguladores. Al parecer, la red social se podrá usar sin necesidad de contar con una cuenta. Esto permitiría que la plataforma se utilice “para consumo”; es decir, para ver las publicaciones de otros, pero sin poder hacer propias. Quienes sí deseen compartir contenidos tendrán que crear un perfil específico o vincular uno de Instagram ya existente.